Desde que en las primeras décadas del año 800 era descubierto el sepulcro del Apóstol Santiago, la capital de Galicia ha sido el destino año tras año de miles de peregrinos que acuden a la catedral de Santiago de Compostela para venerar al Apóstol. Desde Caldas de Reis, a sólo nueve kilómetros de Cuntis, parte la penúltima etapa de una de las vertientes del Camino de Santiago con mayor peregrinación: el Camino Portugués.
Un total de 118,4 kilómetros separan la localidad de Tui -situada al Sur de Galicia y haciendo frontera con Portugal- de la Catedral de Santiago, formando uno de los múltiples recorridos del Camino Portugués, con un total de cinco etapas diferenciadas. La cuarta y penúltima de ellas abarca el tramo comprendido entre Caldas de Reis y Padrón con 18.8 kilómetros de distancia, mientras que el tramo final entre Padrón y Santiago consta de 23,58 kilómetros.
En estos 42 últimos kilómetros de recorrido se puede disfrutar de una experiencia única. Además de cumplir una tradición que viene desde varios milenos atrás, no hay mejor manera para disfrutar de la Galicia más natural y profunda, conociendo los pueblos más tradicionales y visitando los albergues que viven para dar cobijo a los peregrinos noche tras noche.
Son varios miles los peregrinos que llegan a Santiago cada año tras días, semanas o meses de recorrido andando, en bicicleta o a caballo por alguno de los diferentes Caminos existentes. Sea cual sea su punto de partida, todos y cada uno de ellos coinciden en que a pesar del cansancio, las condiciones meteorológicas, que en ocasiones pueden complicar la ruta, la dureza de días y días caminando y el peso de la mochila a cuestas, hacer el Camino de Santiago es la mejor manera de conocer Galicia y, sobre todo, de conocerse a uno mismo
